Como bien sabemos los medicamentos deben ser indicados por un médico calificado, luego de una evaluación completa que establezca un diagnóstico preciso y, por ende, un adecuado tratamiento farmacológico.
Sin embargo, una vez que el especialista indica una terapia con fármacos, es responsabilidad de nosotros como pacientes utilizarlos de manera correcta, en las dosis, vías de administración y durante tiempos específicos, para evitar riesgos de sobre medicación, adicciones o efectos adversos.
Para que podamos usar racionalmente un medicamento es importante disponer de información lo más completa y clara posible. Además de la explicación que el médico nos brinde, nosotros podemos encontrar más detalles en el “prospecto” que se encuentra usualmente dentro de la caja del producto. También, podemos consultar con el Farmacéutico residente de nuestra Fundafarmacia de confianza, si tenemos alguna duda sobre la utilización de una medicina.
Recuerda que el tratamiento farmacológico debe ser personalizado, y cada cierto tiempo debemos consultar con nuestro médico para ajustar las dosis en caso necesario; es importante que no lo hagamos nosotros mismos, ya que debemos considerar factores que sólo el especialista puede determinar. No pongas en riesgo tu salud, o la de su familia, ¡no se automedique!